Los introvertidos no son inseguros, sino que les gusta la soledad para explorar su mundo interior y no se congelan cuando deben hablar frente a otros.
¿Sabías que siendo introvertido también puedes ser un gran líder?
Ser introvertido comúnmente se entiende como un defecto o una limitante para el desarrollo tanto personal como profesional de una persona. Pero créanlo o no, muchas personas destacadas, exitosas y líderes que tienen personalidades más bien introvertidas como Martin Luther King, Bill Gates, Mark Zuckenberg e incluso Gandhi, por nombrar algunos.
El éxito para cualquier proyecto depende del liderazgo que lo encabeza. Por eso, es importante que el líder posea características relevantes y, comúnmente, basamos estas cualidades en el estereotipo del "buen líder," que es una persona con una personalidad encantadora, extrovertida y carismática. Pero líderes introvertidos muy exitosos, tales como Bill Gates o Mark Zuckerberg, han empezado a romper este estereotipo.
Hay que diferenciar la timidez de la introversión que, contrario a lo que se cree, no son sinónimos. Las personas tímidas son inseguras, se paralizan frente a todo lo desconocido o situaciones donde son el centro de atención, como hablar en público. Y no solo no puedes, sino que buscan activamente no hacerlo o evitarlo.
Por otro lado, los introvertidos no son inseguros, sino que les gusta la soledad para explorar su mundo interior y no se congelan cuando deben hablar frente a otros. Mientras las personas tímidas se callan o se aíslan por miedo, los introvertidos lo hacen porque no sienten la necesidad de hablar constantemente y cuando la sienten lo hacen sin problemas.
Eso se deben a que poseen una serie de características positivas que logran que sean más efectivos como:
Una gran voluntad para trabajar
Los motiva la efectividad
Tienen grandes aspiraciones respecto a su rol en el proyecto
Son humildes
Son empáticos
Son más conceptuales y prácticos
Están en paz consigo mismo
Son innovadores, canalizada por su soledad
Cautos, piensan y luego actúan
Tienen una alta capacidad de concentración
Por esencia son calmados y no pierden la paciencia
Pueden trabajar solos o en equipo efectivamente
Se enfocan el objetivo
Son abiertos a escuchar a todos los integrantes del equipo
Logran obtener un buen ambiente laboral
Con todos estos atributos no es de extrañar que actualmente un 40 por ciento de los líderes en el mercado sean introvertidos. Los líderes extrovertidos se mueven más por la ambición y el reconocimiento de los logros, en cambio los introvertidos centran más en su rol y el de su equipo en la productividad y efectividad del proyecto, sin buscar un reconocimiento posterior.
Sabemos que lo que más vende es ser popular para los demás, pero es imposible ser monedita de oro. Esta exigencia -propia de las personalidades extrovertidas- les juega en contra cuando obtienen el puesto de líder, pues son más propensos a aparentar o cambiar rasgos de su personalidad para seguir siendo aceptados que con el tiempo los agota y afectan en el trabajo.
En cambio los introvertidos, que se aceptan y conocen, al ser elegidos líderes encuentran en dicho rol un espacio para lograr una mayor efectividad en su trabajo junto a su propio equipo.
Así que si eres introvertido y pensaste que posiblemente no podría ser líder, piénsalo de nuevo porque podrías cambiar tu trabajo o incluso el mundo.
